Escárzaga – Fausto Reinaga, El Indio y Los Caudillos Militares en Bolivia

  • MERIDIONAL Revista Chilena de Estudios LatinoamericanosNmero 4,abril 2015, 143-171Fausto Reinaga, el indio y los caudillos militares enBoliviaFabiola EscrzagaUniversidad Autnoma Metropolitana, unidadXochimilco, Mxico[email protected]Resumen: Analizaremos el papel que Fausto Reinaga asign endistintas etapas de su vida y pensamiento a la alianza de las masasindias con las Fuerzas Armadas para la consecucin de la Revolucinindia en Bolivia. Se atender especialmente a la valoracin positivaque hizo de varios caudillos militares de origen popular que endistintos momentos de la historia, como presidentes de la repblica,asumieron programas antioligrquicos y antifeudales y fueronenfrentados y derrotados por las lites dominantes que lograroneliminarlos e impidieron que las transformaciones que iniciaronpudieran concretarse, dejando honda huella en la memoria popular yen el pensamiento del primer intelectual indio: Fausto Reinaga,para quien estas experiencias, aun ms que aquellas de los partidosdirigidos por civiles de clase media, fueron las que marcaron lasvas de transformacin social en Bolivia.palaBRas clave: Fausto Reinaga, indianismo, caudillos militares,gobiernos militares de izquierda, Bolivia.FausTo Reinaga, THe indian and THe waRloRdsaBsTRacT: We will analyze the role that Fausto Reinaga assignedin various stages of his life and thought to the alliance betweenthe indian masses and the Army to achieve the Indian Revolution inBoliva. We will dedicate especial attention to the positiveassessment he made of several warlords of popular
  • 144 MERIDIONAL Revista Chilena de Estudios Latinoamericanos 4,abril 2015origin who, as presidents of the Republic in different momentsof the history, took on anti-oligarchic and anti-feudal programs.These were opposed and defeated by the dominant elites, whichmanaged to eliminate them and prevent the transformations that suchprograms had initiated. Thus, these warlords left a great footprintin the popular memory and in the thought of the first indianintellectual: Fausto Reinaga. For whom these experiences, even morethan the ones of the parties directed by middle class civilians,were the ones that marked the ways of social transformation inBolivia.keywoRds: Fausto Reinaga, indianism, warlords, left militarygovernments, Bolivia.inTRoduccinEn 1981, Fausto Reinaga public el libro Bolivia y la Revolucinde las Fuerzas Armadas, motivado por el hecho de que en su primerdiscurso a la nacin el presidente golpista general Luis Garca Meza1haba retomado una idea de su autora: El Imperativo Csmico es que elhombre haga lo que es su deber!.La revolucin de las fuerzas armadas a la que alude Reinaga en elttulo de su libro hace referencia al golpe de Estado del 17 dejulio de 1980. En esta obra, Reinaga afirma que el golpe fue hechoen contra de las derechas e izquierdas del mundo y de Bolivia,asumiendo as la denominacin que haca de s mismo el propio gobiernomilitar y que Reinaga identifica o contrasta con la revolucinamutica que l propone hacer.Este error de clculo poltico (la valoracin positiva de GarcaMeza), nunca reconocido como tal, le vali a Reinaga el repudiototal de las izquierdas bolivianas, a las que haba comenzado acuestionar de manera1 Garca Meza encabez un golpe militar que impidi que elpresidente electo, Hernn Siles Suazo, tomara posesin del cargo.Gobern entre julio de 1980 y agosto de 1981. La suya fue una de lasdictaduras ms represivas de Bolivia, fueron asesinados el diputadoMarcelo Quiroga Santa Cruz, dirigente del Partido Socialista y ochodirigentes del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR). Lapresin popular y de la embajada norteamericana lo llevaron arenunciar, retornando un ao despus la democracia con la toma deposesin de Siles Suazo.
  • Fabiola Escrzaga. Fausto Reinaga, el indio y los caudillosmilitares en Bolivia 145frontal al menos desde el ao 1964, a partir de la formulacin desu ideologa indianista, con argumentos muy coherentes desde laperspectiva india. Pero la supuesta identificacin del escritorindio con el gobierno de Garca Meza que segn asumieron susadversarios quedaba demostrada por la publicacin del libro significsu descalificacin definitiva como fascista por parte de esasizquierdas, que as eludieron la discusin de fondo sobre loscuestionamientos que Reinaga haca de ellas. De esta manera secancel el debate nunca iniciado de sus ideas por parte de lasizquierdas y se afirm el lugar marginal que le haba sido impuestoen el mundo intelectual y poltico boliviano, expresado en el vacoque se haba hecho alrededor suyo, relegndolo a un mundo paralelo enel que se ignoraba su discurso, as como trataba de ignorarse lapresencia del sujeto indio que este expresaba. Esta incomunicacin eincomunicabilidad de los argumentos de cada parte, la imposibilidadde un debate, refleja a nivel de las ideas la polarizacin socialque Reinaga denunciaba en la vida social boliviana.Para tratar de entender el sentido de sus palabras y el contextode su reivindicacin (o no) del gobierno militar de Garca Meza en1981, pasar revista a las experiencias de los caudillosmilitares-presidentes de la repblica reivindicados por Reinaga endistintos momentos de la historia boliviana, y los atributos ytareas que este considera que cumplieron o pudieron cumplir talespersonajes en el proceso de liberacin india; el tipo de vnculo queestablecieron con las masas indias; y lo que tales planteamientosrevelan sobre los proyectos de transformacin que Reinaga postul endistintos momentos de su pensamiento. No pretendo hacer una lecturahistoriogrfica de los textos de Reinaga para desentraar la verdad ofalsedad de los hechos que resea, pues su obra no tiene unafinalidad acadmica sino poltica. Reinaga fue un idelogo, no unhistoriador: su objetivo fue elaborar una interpretacin alternativade la historia de Bolivia desde la perspectiva india, paraconstruir una ideologa para los indios que superara la influenciadel marxismo y del nacionalismo revolucionario mestizo. Ms bien, mepropongo rastrear los procesos reflexivos que este desarrolla en suobra; identificar las construcciones que hace en tanto idelogo; darcuenta de los cambios de interpretacin que ofrece en sus distintasetapas; y poner de relieve los patrones de repeticin de losprocesos histricos que Reinaga busca y encuentra y que le permitenfortalecer determinadas propuestas polticas. Por otra parte,tampoco quien escribe estas lneas es historiadora.
  • 146 MERIDIONAL Revista Chilena de Estudios Latinoamericanos 4,abril 2015Adelanto la premisa de que Reinaga no lea la relacin de losindios con las fuerzas armadas desde la perspectiva marxistaoccidental propia de las izquierdas de su tiempo, incluidas lasviolentas experiencias de las izquierdas latinoamericanas con lasdictaduras conosureas de los aos setenta del siglo XX. Superspectiva era otra, la historia larga de los indios y su relacincon el Ejrcito, que era la expresin institucional ms slida delEstado boliviano hasta entonces. Abordar los casos de ManuelIsidoro Belzu (1808-1865), Gualberto Villarroel (1908-1946) y JuanJos Torres (1920-1976), que fueron los referentes histricos msimportantes de la lectura de Reinaga. Aunque hubo otros en lahistoria boliviana, se trata de caudillos militares que fueronpresidentes y enarbolaron proyectos antioligrquicos y proindgenas;personajes sobre cuyo papel en la historia Reinaga reflexion endistintos momentos y textos. Resear el anlisis de Reinagaconsiderando, segn el caso, los atributos personales y morales quedestaca de cada uno de estos caudillos y que marcan su relacin conlas masas indias, la forma de llegar al poder, el proyecto queintentan poner en marcha, el sujeto de su proyecto y su estrategia;as como la estrategia con que los enfrenta la oligarqua, y su fintrgico; la construccin mtica que hace del caudillo-presidente; ypor ltimo, su participacin personal o expectativa de tal en elproceso encabezado por esos gobiernos, cuando la hubo.BiogRaFa, expeRiencia polTica y pensamienToComo sealamos en otro texto:La larga vida de Reinaga (1906-1994), estuvo marcada porreiteradas frustraciones polticas y por diversos trnsitos. Unprimer nivel de sus trnsitos es el del proyecto poltico al queadhiere: inicia como socialista y marxista (1930-1944), luego esnacionalista revolucionario (1944-1960), ms tarde indianista(1960-1974) y finalmente amautista o reinaguista (1974-1994).Considerando la matriz epistemolgica de sus ideas, podemosidentificar dos etapas nicamente: la marxista (1930-1960) y laindianista (1960-1994). El otro nivel, es el de sus trnsitosidentitarios: el primero de desindianizacin (1924-1953), marcadopor la formacin occidental adquirida a travs de la escolarizacin, apartir de la cual busc insertarse en el mundo intelectualdominante. El
  • Fabiola Escrzaga. Fausto Reinaga, el indio y los caudillosmilitares en Bolivia 147segundo, es de reindianizacin (1953-1994), en el que losfracasos experimentados lo hacen tomar la decisin de volver a serindio (Escrzaga, Comunidad indgena 147).Los cambios de posicionamiento poltico de Reinaga, que llamamostransiciones de Reinaga, tienen su base en tres ejes: los cambiospolticos y sociales producidos en el proceso histrico boliviano enrelacin con la poblacin india; su experiencia poltica personal encada etapa; y el desarrollo, a partir de los anteriores, de unamayor comprensin de la realidad concreta propiciada por talescambios, expresada en sus elaboraciones ideolgicas. El pensamientode Reinaga se hace eco del proceso de constitucin del indio comoactor poltico central de la historia de Bolivia a lo largo delsiglo XX y es vivido por Reinaga durante un largo trecho debido asu larga vida. El primer hito significativo fue la Guerra delChaco, en la que el gobierno enva masivamente a los indios comocarne de can y se produce un genocidio indgena por la ineptitud delos generales. La guerra ser escenario del encuentro entre la tropaindia y la oficialidad mestiza que impulsa la toma de conciencia deambos actores sobre el peso de los indios en el proyecto deconstruccin de una nacin boliviana. En este episodio surgen almenos tres proyectos, con distinto grado de elaboracin y diferentesposibilidades de realizacin: el de los propios indios, el de laoficialidad joven que ocupar el gobierno ms adelante, y el de losciviles nacionalistas que crearn el Movimiento NacionalistaRevolucionario (MNR) y consolidarn su poder a partir de laRevolucin de 1952 durante 12 aos. Ellos incorporan al indio en lostrminos que convienen a su proyecto mestizo y no en los demandadospor los propios indios. Lo anterior produce una nueva frustracin yde ella surge el pensamiento indianista de Reinaga. Sustransiciones son, por ello, adecuaciones de su proyecto polticoindio a los cambios que se producan en la realidad india. Ellasrepresentan cambios radicales en cuanto a la propuesta detransformacin a la que aspira, pero tienen como constante laperspectiva india desde la que se formulan.En todas las etapas de su elaboracin ideolgica y propuestaprogramtica el indio ocupa un papel protagnico, aunque de diferentemanera. En la etapa socialista, el sujeto revolucionario era paraReinaga, como para los marxistas en general, el proletariado. Noobstante, el indio aparece centralmente como el sector mayoritariode la poblacin y el que encarna la contradiccin fundamental:latifundio-servidumbre indgena;
  • 148 MERIDIONAL Revista Chilena de Estudios Latinoamericanos 4,abril 2015sujeto de la nacin a construir, aunque supeditado a la conduccindel proletariado en la construccin del socialismo, en unplanteamiento muy cercano al de Maritegui (Escrzaga, Lahuella).Esta delimitacin de etapas tiene que considerarse conflexibilidad, pues hay ideas de momentos anteriores que reapareceny otras que se prefiguran en los perodos precedentes, antes de suaparicin plena. Encontramos tambin que, en la medida en que lostemas centrales se mantienen de una etapa a otra, hayposicionamientos contradictorios, como veremos en relacin con eltema que nos ocupa. Porque claramente su identificacin de loscaudillos militares reformistas como posibles aliados de los indioscorresponde, fundamentalmente, a la etapa nacionalistarevolucionaria, en la que ellos encabezaron gobiernosantioligrquicos y proindios, pero reaparece como estrategia posiblecuando resurgen gobiernos militares en la historia boliviana yreactivan proyectos y perspectivas asumidas por l en el pasado; esel caso de Torres y de Garca Meza.el caudillismo miliTaR y los indios en los andesEn Ecuador, Per y Bolivia fue una experiencia reiterada quegobiernos militares asumieran proyectos antioligrquicos,antimperialistas y desarrollistas que enfrentaron o terminaron conla servidumbre indgena y propiciaron la incorporacin de los indiosa la vida nacional2. La identificacin de Fausto Reinaga con elcaudillismo militar se sustenta en la valoracin positiva delEstado, presente en la historia de los indios desde la pocaprehispnica. Sera entonces una expresin particular de la memorialarga del pacto de reciprocidad del que nos habla Tristan Platt,establecido entre el Inca y las comunidades campesinas, que serenegociaba peridicamente entre las partes a travs de accionesviolentas, pacto que la Corona espaola retom modificando algunos desus trminos y que el liberalismo rompi al iniciarse laRepblica.2 Velasco Alvarado (1968-1975) en Per y Rodrguez Lara(1972-1976) en Ecuador. Y lo intentaron Andrs A. Cceres (1886-1890y 1894-1895) en Per y Eloy Alfaro (1897-1901 y 1906-1911) enEcuador.
  • Fabiola Escrzaga. Fausto Reinaga, el indio y los caudillosmilitares en Bolivia 149Una categora de anlisis para abordar el fenmeno del caudillismomilitar es la del bonapartismo, propuesta por Marx para explicarprocesos en los que la debilidad o claramente la ausencia de laburguesa como clase dominante (como ocurre en muchos pases deAmrica Latina) permiten que el ejrcito o los caudillos militarestomen su lugar como cabeza de la alianza capaz de enfrentar ocontener el poder oligrquico, con el objetivo de desarrollarprocesos de modernizacin econmica y, eventualmente, enfrentar losintereses del capital extranjero para promover la acumulacininterna y propiciar la creacin de burguesas nacionales, como ocurrien los casos sealados (aunque todos ellos tuvieron alcanceslimitados). En esta estrategia el papel del Estado es central y elejrcito es el ms slido de los componentes del Estado.Para Cecilia Mndez, la participacin india en las guerras civilesy en las guerras contra pases vecinos en el siglo XIX, promovidapor los caudillos militares que requeran de las masas indias paracombatir, fue la primera forma de su participacin en la polticanacional. Si bien fue generalmente de manera subordinada a losintereses de otros sectores, ello facilit la identificacin deindios y caudillos y la generacin de compromisos por parte de lossegundos para con los indios, que combatan no por la patriareivindicada por los caudillos, con la que poco o nada seidentificaban, sino por su liberacin del yugo de losterratenientes, que era la recompensa prometida o esperada. Demanera que esos caudillos y la institucin que integraban fueron elcanal principal de insercin y de participacin del campesinado indioen la poltica nacional.En guerras como la del Pacfico o la del Chaco estos aportaronlos recursos y prcticas fundamentales: hombres, mujeres, alimentos,animales, control territorial, de una manera decisiva que notuvieron los polticos civiles que pertenecan a la lite oligrquicaque era su opresora. Pero, como sealan Ortiz y Mndez, a medida queel ejrcito se profesionaliz a finales del siglo XIX, la relacin conel campesinado indio se hizo ms jerrquica y vertical. Mientrastanto, en los regmenes civiles constitucionales del siglo XX, laexclusin del campesinado se acrecent. Tal profesionalizacin buscabatambin la despolitizacin del ejrcito para que sirvieraindistintamente al grupo civil que llegara al poder; un proceso quecoincide con la estrategia de cooptacin de las fuerzas armadas comoun instrumento del imperialismo, primero el britnico y despus elnorteamericano (Mndez 17).
  • 150 MERIDIONAL Revista Chilena de Estudios Latinoamericanos 4,abril 2015La composicin social heterognea de esos ejrcitos, producto desociedades tnicamente divididas, impidi que esa fuera la nica pautay favoreci la alianza de los caudillos militares con los indios.Porque la misma profesionalizacin de los ejrcitos tambin posibilitla incorporacin de los indios a travs del servicio militarobligatorio. Este mecanismo tuvo un carcter contradictorio:signific por una parte cargar los costos de la defensa militarsobre las comunidades indias, a travs de la serie de exacciones conque se beneficiaba de la fuerza de trabajo india, como parte de lascargas feudales que estos soportaban. Y, por otra parte, era unaforma violenta de integracin del indio a la sociedad nacional atravs de la disciplina (debido al maltrato que se le podainfligir), la castellanizacin, la alfabetizacin, la higienizacin,etc. Era, pues, el vehculo de desindianizacin ms importante despusde la escuela (o ms bien antes de que esta les fuera accesible) ygarantizaba una lenta integracin de la masa india. Pero tambin erala manera de aprender el manejo de las armas y eventualmenteacceder a ellas para sus propios fines. Al mismo tiempo, era elvehculo para el ascenso social de sectores medios sobre la base delos mritos personales y los habilitaba como intermediarios entrelos grupos dominantes y los indios. Era, en fin, el espacio deencuentro entre la oficialidad mestiza y la masa india que permitila identificacin entre ellos como parte del polo de la sociedadafectado por el racismo de los miembros de la oligarqua, si bien engrados muy diferentes. Ello concreta la divisin del ejrcito en dosfracciones, la oligrquica y la modernizadora, la segunda de lascuales ofrece un proyecto alternativo en beneficio de las masasindias y est conformado masivamente por ellas. As, el ejrcito estde hecho infiltrado por los indios, dividido segn criterios declase y, por tanto, permeado por el conflicto social. Los gobiernosmilitares socialistas bolivianos3 son evidencia de la posibilidadde reorientar su programa.3 Se denomina as a los gobiernos militares antioligrquicos yantiimperialistas de los tenientes coroneles David Toro (1936-1937)y de Germn Busch (1937-1939), quienes participaron en la Guerra delChaco y asumieron como programa de sus gobiernos las tareas deliberacin de los campesinos indgenas de la servidumbre, eldesarrollo capitalista y la defensa de la soberana frente alcapital extranjero, a partir de la retencin de mayor excedente dela renta obtenida por la exportacin de las materias primas y,tendencialmente, de la incorporacin de la poblacin indgena almercado y a la nacin como asalariados libres. Villarroel era partedel mismo grupo. Ellos formularon y aplicaron el programanacionalista antes que el MNR.
  • Fabiola Escrzaga. Fausto Reinaga, el indio y los caudillosmilitares en Bolivia 151Tales gobiernos militares fueron encabezados por caudillos deorigen popular o con algn grado de sangre india, que adquirieron elpoder poltico por la va de su ascendiente sobre la tropa india apartir de su capacidad de conduccin y hasta heroicidad, demostradasen acciones de armas en contra de los enemigos externos, siempre msfuertes. Eran cabeza de un proyecto nacionalista revolucionariocuyos aliados fundamentales eran los indios. La perspectiva deReinaga era la de una alianza en trminos de horizontalidad, aunqueno era necesariamente la perspectiva de esos caudillos, que seasuman como libertadores, benefactores o padres de los indios.Belzu, pRecuRsoR de la Revolucin nacionalComenzaremos con el general Manuel Isidoro Belzu (1808-1865),caudillo militar que fue presidente entre 1848 y 1855. Reinaga lededic un libro completo y lo public como Belzu, precursor de laRevolucin nacional. Las interpretaciones sobre el caudillo sonpolarizadas y Reinaga tom partido a favor suyo. Escribi el libro en1953, motivado por la convocatoria de un concurso nacional de laComuna pacea para la elaboracin de un ensayo biogrfico sobre elpersonaje, en el contexto del inicio del gobierno del MNR quebuscaba exaltar su figura y legitimar por su intermedio el proyectodel gobierno. La interpretacin de Reinaga es mitificadora; sobre sufigura construy el modelo de lo que deba ser el caudillo militarque liberara a los indios, y us ese modelo para medir a otroscaudillos, que no dieron la talla de Belzu, como veremos msadelante.Aunque el hilo conductor del texto sigue las pautas establecidasen las bases del concurso4, ellas coinciden con la perspectiva delautor en ese momento, es decir, la reivindicacin de la revolucinnacional y la identificacin de ambos procesos histricos. Pero larevolucin nacional que Reinaga reivindica y con la que compara laobra de Belzu no es la del MNR de 1952, sino la intentadapreviamente durante el gobierno del4 El belcismo y su influencia en la historia boliviana, y laanaloga de la insurgencia multitudinaria del siglo XIX, con laRevolucin Nacional de nuestros das (Reinaga, Belzu VII).
  • 152 MERIDIONAL Revista Chilena de Estudios Latinoamericanos 4,abril 2015teniente coronel Gualberto Villarroel. En el texto satisface suspropios objetivos de interpretacin histrica con fines ideolgicos,pero aprovecha los recursos de publicacin que el premio lepermiti.En la parte biogrfica, el autor seala el origen humilde delmilitar: su madre era pajuelera5 y su padrastro obrero de mina. Denio qued impactado al presenciar la recepcin que el pueblo de LaPaz hizo a las tropas de Simn Bolvar y a sus lderes, y quiso sermilitar. Estudi en el Convento de San Francisco en La Paz, lo quele permiti obtener una formacin intelectual de calidad pese a supobreza. Su padrastro quera que fuera fraile y su madre lo alent ensecreto para que fuera militar, y a los quince aos se uni alejrcito de la Confederacin Per-Boliviana al mando del general SantaCruz6. Hizo una carrera exitosa debido a su gran inteligencia, yella le permiti alcanzar la presidencia de su pas en un contexto dedescontento popular contra la dictadura de Ballivian y de crisiseconmica. Fue designado como presidente provisional en 1848, y en1851 la promulgacin de una nueva Constitucin le permiti asumir comopresidente constitucional7.La presin de los terratenientes sobre su gobierno, expresada ennumerosas revueltas en su contra, lo llev a dimitir en agosto de1855 y a viajar a Europa, donde permaneci diez aos, desempeandofunciones diplomticas. Regres a su pas en 1864 y se alz contra elgeneral Mariano Melgarejo, que estaba a punto de tomar el poder. Elapoyo del pueblo le permiti vencer a las fuerzas del gobierno, peroen la confusin, Melgarejo entr al Palacio Quemado y asesin a Belzupor la espalda. Su muerte fue, segn Reinaga, una tragedia para elpueblo indio y mestizo porque frustr un proyecto favorable a susintereses.En la valoracin de la figura de Belzu, Reinaga juega con doselementos: el ya comentado como precursor del nacionalismorevolucionario; y otro menos verosmil: que habiendo asumido elsocialismo durante su exilio en Europa, pretenda aplicar talprograma en su segundo mandato, que no se5 Fabricaba o venda cerillos.6 Se cas con la escritora argentinaJuana Manuela Gorriti, hija del General JosIgnacio Gorriti.7 Procedimiento de legitimacin del gobierno quetambin implementaronVillarroel y Busch.
  • Fabiola Escrzaga. Fausto Reinaga, el indio y los caudillosmilitares en Bolivia 153concret. As, el belcismo fue asumido por Reinaga como unproyecto de construccin nacional que inclua a los indios, y porello es la temprana conjuncin del programa de clase y el nacional,que se concretara en una revolucin socialista que reconociera lapresencia indgena y que liberara al indio de la servidumbre, en elque Reinaga se declara socialista e identifica el programa msavanzado de Belzu con el socialismo. Lo que permite constatar lapersistencia de la influencia mariateguista en ese momento(Escrzaga, La huella).El nacionalismo que postula Reinaga en el texto sobre Belzu noes de negacin o asimilacin del indio, como no lo era tampoco elsocialismo de Maritegui, y s lo eran, en cambio, el nacionalismodel MNR y el socialismo boliviano que Reinaga cuestionar ms tarde.Tampoco es todava anti cholo8, pues los cholos son identificadospor l como parte del pueblo (son obreros, artesanos y sectoresmedios) y por ello son aliados naturales de los indios. Reivindicauna perspectiva clasista, es marxista en su anlisis de laestructura social, pero en su programa poltico es nacionalista.Retoma la caracterizacin que hace Maritegui sobre la continuidadde las condiciones sociales y las formas de dominacin y la condicinde exclusin de la poblacin indgena de la etapa colonial a larepublicana y hasta ese momento. Asume, tambin, el trminogamonalismo, del que cita extensamente la definicin que propone elamauta peruano, en tanto mecanismo de dominacin que subordina todaslas instancias del poder poltico a los intereses de losterratenientes y perpeta la condicin servil de la poblacin indgena(Reinaga, Belzu 16-17).Su disputa es centralmente con la intelectualidad gamonal y lalectura que han hecho de Belzu autores como Fernando Daz de Medinaque lo califica como un mandn9, plebeyo e ignorante, y del belcismocomo el reinado de la chusma exaltada. Mientras que para otrosautores fue el Mahoma boliviano o el Apstol de los indios10(Reinaga, Belzu XV-XVII).La resea que hace sobre las medidas tomadas por Belzu durante sugobierno en relacin con los indios es semejante al relato idlicoque8 Mestizo.9 Cacique.10 Retoma la biografa de Alfredo Sanjinstitulada El Quijote mestizo.
  • 154 MERIDIONAL Revista Chilena de Estudios Latinoamericanos 4,abril 2015Maritegui hace sobre el tiempo de los incas y la dinmica de lacomunidad indgena lejos de la presencia latifundista: la comunidadlibre. Citaremos en extenso un pasaje por la informacin que ofrecesobre las relaciones de produccin vigentes, las formas de luchaindia y por la respuesta de los terratenientes, que ilustran laspautas de extrema polarizacin social, la lucha de razas, en elmomento de su suspensin. Ms que basarse en fuentes historiogrficas,Reinaga expresa, posiblemente, la construccin mtica de los propiosindios por la va de la tradicin oral.() durante el rgimen de Belzu, los terratenientes se comportaronsumisos; llevaron una vida de humildad resignada enfrente al indioenvalentonado; briosamente rebelde () En la prctica los colonossuprimieron todos los servicios gratuitos para con el patrn. Elservaje, en todas sus modalidades, fue materialmente abolido. Loslatifundistas no pisaron sus fundos, sus haciendas. Los colonos,ante el abandono fsico, y la desaparicin de los gamonalesresultaron, de hecho, dueos de las tierras gamonales; ellos lasfecundaban con su esfuerzo y sudor. Cumplindose de tal manera,aquel principio sabio, que dice: la tierra para el que la trabaje() La tierra libre, con el siervo libre, comenz a rendir sus ptimosfrutos (Reinaga, Belzu 82-83).En el texto aparecen algunos elementos del programa indianistafuturo, como la reivindicacin del Gran Imperio del Tahuantinsuyo yde la gesta de los caudillos indios, los Katari, y la de Belzu serauna continuacin de ella; otro es la recuperacin de la unidadterritorial de los Andes destruida con la Conquista.Reinaga idealiza a Belzu, pero seala indirectamente laslimitaciones de su gobierno, enumerando las medidas que supone debitomar, pero no pudo, en su abortado segundo mandato. Son dos puntoscentrales: la recuperacin de la tierra y el poder para el indio; elprimero es la reivindicacin central de su etapa nacionalista y lasegunda lo ser de su etapa indianista. En el plano econmico: larecuperacin de la tierra despojada por los latifundistas, laliberacin del esclavo-siervo indio, la tecnificacin de laagricultura; y la lucha contra los extranjeros que se apoderaban detodas las riquezas nacionales. En el plano poltico, que su sucesorfuera un indio. El ltimo punto era la creacin de la culturanacional a partir del acceso de los indios a la educacin en todoslos niveles para potenciar su participacin en la creacin de esacultura popular que incorporara el sentimiento indio (Reinaga,Belzu 118).
  • Fabiola Escrzaga. Fausto Reinaga, el indio y los caudillosmilitares en Bolivia 155Reinaga hace una lectura caudillista de la historia: de acuerdocon ella, las masas indias requieren un lder que muestre en subiografa el compromiso con el proyecto indio, compromiso que enBelzu est dado por su origen popular, aunque no es un indio sino unmestizo. Por otra parte, en su condicin militar y gracias a surecia personalidad, Belzu conjuga la fuerza necesaria paragarantizar el triunfo, a travs de la unidad. Por efecto de ambascondiciones, se presume que compensa con sus atributos personalesla debilidad de los indios, debida a su carencia de armas y deotros recursos tcnicos. Adems de ser esta una constante en lahistoria de los pases andinos, como sealamos, es posible que laadmiracin de Reinaga por los militares tuviera otro componente.Dado que era discapacitado (careca del brazo izquierdo, que le fuecercenado siendo un beb11) no particip como los jvenes indios delservicio militar obligatorio.gualBeRTo villaRRoel, el pResidenTe colgadoA diferencia de la lejana experiencia de Belzu un siglo atrs, ladel gobierno de Villarroel fue muy cercana para Reinaga, muyenriquecedora y muy traumtica porque fue diputado durante esegobierno, y su desenlace el colgamiento del presidente marcpolticamente a Fausto y lo confront definitivamente con la cpuladel MNR, a la que consider traidora y corresponsable de suejecucin. Aunque escribi un extenso volumen sobre Villarroel en1950, no logr publicarlo por falta de recursos materiales; el ttuloera Villarroel. Hombre y mito12. Probablemente el cambio depercepcin sobre el personaje, una vez superada su etapanacionalista, hizo que perdiera inters en publicarlo. De manera queno tenemos al alcance el desarrollo sistemtico que hizo sobre elpersonaje en un momento cercano a los acontecimientos, sinomenciones breves en11 De acuerdo al relato del hecho a su amigo Guillermo Carnero,fue un castigo y forma de presin a su madre que lideraba unlevantamiento indio, para que diera la orden de retirada a losrebeldes. El lo llama su desgarro, que provoc un hondoresentimiento, y le permiti aprender a leer y lo llev por loscaminos del pensamiento, infrecuentes en ese tiempo para un indio(Escrzaga, Indianismos 90-91; La huella 241).12 En la introduccin de su libro Tierra y Libertad, de 1953,seala que el captulo dedicado a Villarroel es parte de aquel(Reinaga, Tierra y libertad 10).
  • 156 MERIDIONAL Revista Chilena de Estudios Latinoamericanos 4,abril 2015obras posteriores, representativas de distintos momentos. Es porello que sus juicios son contradictorios.El contexto que precede a la aparicin del proyecto nacionalistarevolucionario se inicia con la Guerra Federal de 1899 y la Rebelinde Zrate Wilka, siendo constantes tanto la lucha de las comunidadesindias por recuperar las tierras de las que fueron despojadas porlos gamonales, como la resistencia contra la servidumbre impuesta apartir de ella. La Ley de 1874 de exvinculacin de las tierras decomunidad13 consum el despojo que se intensific despus de la GuerraFederal. A partir de l se impuso a los indios, fueran colonos ocomunarios, una serie de servicios personales, tanto en beneficiodel Estado como del patrn de la hacienda. El pongueaje era eltrabajo gratuito en beneficio del dueo de la hacienda que el colonoprestaba en la casa del patrn en la ciudad, para lo cual el indiollevaba lo necesario para subsistir y deba dormir en la puerta dela calle. Los servicios del pongo podan ser alquilados por su patrnpor grandes sumas, de las que el pongo no reciba un centavo. Eranverdaderos esclavos. Esta, al igual que otras prcticas, nodesaparecieron sino hasta despus de 1953 (Choque 129-130).Para acabar con tales condiciones de explotacin y opresin losindios se rebelaban. En el primer tercio del siglo XX se vivieronvarias insurrecciones indias, cuya direccin estuvo a cargo de loscaciques apoderados, una figura que posibilit la nueva ley para ladefensa de sus tierras. Expresiones mayores de ese proceso fueronla rebelin de Jess Machaca en 1921 y la de Chayanta en 1927, perohubo continuos levantamientos en distintas regiones.La Guerra del Chaco enfrent a Bolivia y Paraguay entre 1932 y1935, los dos pases ms pobres de la regin, azuzados por los pasesvecinos, Brasil y Argentina, para disputar hipotticos yacimientospetroleros que beneficiaran a empresas inglesas. Para Bolivia erauna guerra ofensiva decidida por un gobierno oligrquico, paraParaguay era una guerra13 Consistente en el catastro de las tierras de comunidad y elreconocimiento de la sayana individual (parcela) como propiedadindividual plena, eliminndose as el reconocimiento jurdico a lascomunidades o ayllus y la posibilidad de defenderse como tales. Selo deja as indefensos frente a este mecanismo que posibilitaba laventa de las tierras, lo que permiti la apropiacin de tierras porlos latifundistas. Una medida similar a la establecida por Bolvaren 1824.
  • Fabiola Escrzaga. Fausto Reinaga, el indio y los caudillosmilitares en Bolivia 157defensiva, aunque sali ganadora con 252.000 km (Barrios). Laguerra fue cruenta y diezm a la poblacin indgena de ambospases14.La poblacin india fue obligada a pelear en la guerra, elreclutamiento se haca a travs de redadas en las comunidades,aprovechando las fiestas y ferias; tambin deban hacer aportacionesen especie. La poblacin india era la poblacin disponible, pero nose le proporcion la preparacin militar necesaria para una guerrainternacional; su participacin fue una carnicera decidida por laslites. La izquierda anarquista promovi la resistencia india alreclutamiento, pero ello no cambi las cosas significativamente. Elenvo de los indios a la guerra fue tambin una forma de represin delos cabecillas de las sublevaciones, pues el contexto de la guerraera la rebelin india previa pero tambin la resistencia alreclutamiento (Choque 195-196).La guerra provoc el despertar de una conciencia nacional entrelos sectores medios, militares y civiles, y la formulacin de unproyecto poltico nacionalista expresado en la creacin de la logiamilitar llamada Razn de Patria (Radepa), integrada por laoficialidad joven que particip en la guerra15, y la creacin por losciviles del partido Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR),en 1941, que disput el poder a la oligarqua terrateniente y mineraen la Revolucin de 1952.La participacin de los indios en la Guerra del Chaco tambincambi su percepcin de las cosas, fue la oportunidad del encuentrocon indios de otras regiones y otras lenguas, les dio una visinnacional propia y les permiti el aprendizaje de nuevas capacidadesorganizativas; les dio, en fin, mayores herramientas para reclamarsus derechos. Se sintieron acreedores del Estado pues habanaportado sus vidas en el campo de batalla a nombre de la patria,algo que para ellos no tena mucho sentido.El encuentro entre los sectores medios, militares y civiles, ylos indios provey de nuevos contenidos al miedo a los indios porparte de blancos, gamonales, gobernantes y la lite del ejrcito, alos ya acumulados por14 Paraguay moviliz 150.000 hombres, en la retaguardia 10.000,tuvo 2.500 prisioneros y 40.000 muertos. Bolivia moviliz 200.000hombres, en la retaguardia 30.000, tuvo 30.000 prisioneros y 50.000muertos (Choque 197).15 Creada al parecer en 1935, por oficiales prisioneros deguerra, en Campo Grande, Asuncin (Barrios).
  • 158 MERIDIONAL Revista Chilena de Estudios Latinoamericanos 4,abril 2015efecto de las insurrecciones ocurridas antes de la guerra y dela condicin mayoritaria de los indios y su descontento. Este miedofue el motor de muchas de las medidas, represivas o reformistas,aplicadas por el ejrcito. Se trataba de desactivar la insurreccingeneral que las pequeas insurrecciones anunciaban y colocar a esafuerza social bajo control y, mejor an, aprovecharla en beneficiopropio.Villarroel fue parte de la generacin de jvenes oficiales queparticiparon en la guerra, fue un hroe en ella y apoy la dictaduraprogresista militar-socialista de David Toro y Germn Busch(1936-39). En diciembre de 1943, asumi la presidencia mediante ungolpe de estado contra el presidente Pearanda, para continuar elprograma de los militares reformistas. Se ali con el MNR, y VctorPaz Estenssoro, jefe de dicho partido, fue su ministro de Hacienda.Durante su mandato, Villarroel promulg reformas sociales como elreconocimiento de los sindicatos y el derecho a pensin y al retirovoluntario de los trabajadores. Su gobierno no fue reconocido porEstados Unidos por sus simpatas con el Eje y sobre todo por susmedidas antioligrquicas y contrarias a los interesesextranjeros.De acuerdo al relato de Reinaga, Villarroel enfrent a laoligarqua y asumi la defensa de los indios: convoc al CongresoIndigenal en 1945, proyectado por Busch y primero en su tipo enAmrica Latina, al que asistieron 5.000 delegados indios de todo elpas, y aboli el pongueaje y mitanaje y prohibi los trabajosgratuitos. La alianza de Villarroel con los indios despert grantemor entre los sectores reaccionarios, que aliados al Partido deIzquierda Revolucionaria (PIR)16 desarrollaron una intensa campaaen su contra, acusndolo de nazi-fascista. Lo responsabilizaron dela masacre indgena de Las Canchas, lo que llev al asesinato delpresidente por una turba india en el Palacio Quemado y alcolgamiento de su cadver en un farol de la Plaza Murillo, el 21 dejulio de 1946. Con l fueron asesinados 280 de los 300 caciquesindios que lo acompaaban en el palacio de gobierno (Reinaga, Tierray libertad 33-34).La violencia del hecho fue tal que la resea de Choque omite laforma de su muerte, lo que hara pensar que Reinaga exageraba loshechos, pero no es as. Zavaleta (Consideraciones Generales) tambinse refiere al hecho en los mismos trminos. Luego del colgamiento deVillarroel,16 Eran los comunistas.
  • Fabiola Escrzaga. Fausto Reinaga, el indio y los caudillosmilitares en Bolivia 159Reinaga se exilia en Buenos Aires, donde vivi un ao y medio17.All debati con el grupo de exiliados del MNR en el que siguimilitando y escribi un folleto sobre su dirigente Vctor PazEstensoro18, en el que cuestion duramente al caudillo mximo por lafalta de programa y la traicin a Villarroel19. Reinaga hace sucrtica asumindose como militante de base del MNR y con el derechode hacerla en tanto tal, as cuestiona al caudillo y a la camarilla,pero no niega la legitimidad del partido. El libro le cost laexpulsin del partido, en febrero de 1947. En los textos publicadosen 1953, profundiza su crtica al MNR, lo descalifica como elpromotor y sujeto de la revolucin nacional, afirma que fueron lasmasas mineras, fabriles e indias los artfices de su propialiberacin, y no el MNR, que no es ni se identifica con ellas(Reinaga, Tierra y libertad 12-13). Seala que fueron las luchasindias de 1947, como reaccin al asesinato de Villarroel, las quecondujeron a la Revolucin del 52. Marca as una pauta interpretativadistinta a la lectura nacionalista revolucionaria o la marxistacomo la de Zavaleta (El poder dual ), que atribuyen a los obrerosla concesin de la tierra a los indios (Reinaga, La revolucin417).En su etapa indianista, Reinaga fue muy crtico tambin de losalcances de los gobiernos militares antioligrquicos y de lasrazones de su actuar. Cuestiona el que no se hayan propuesto ladevolucin de la tierra al indio, la liberacin de la raza, ni laentrega del poder al indio. Seala tambin que ninguno tuvo para elindio el embrujo mesinico de Belzu, de ah que a ninguno de ellos elindio le crey o sigui, terminaron siendo gobiernos dbiles porque noestablecieron una alianza con los indios y eso hizo posible suasesinato, y los que los sucedieron fueron gobiernos que masacrarona los indios.17 Desde octubre de 1946 hasta abril de 1948.18 Titulado VctorPaz Estenssoro, y publicado en La Paz en 1949.19 La traicinconsiste en que en el contexto de la agresin al presidente, PazEstenssoro present su renuncia, junto con los ministros deTrabajo y Agricultura, tambin del MNR, abandonndolo a susuerte.
  • 160 MERIDIONAL Revista Chilena de Estudios Latinoamericanos 4,abril 2015el goBieRno del indio Juan Jos ToRResJuan Jos Torres Gonzlez (1920-1976)20 fue presidente de Boliviaentre el 7 de octubre de 1970 y el 21 de agosto de 1971. El 7 deoctubre de 1970, con la finalidad de evitar un golpe de Estado dela derecha contra el gobierno del general Alfredo Ovando Candia21,Torres asumi el poder por medio de un levantamiento popular conparticipacin de trabajadores, organizaciones campesinas, elmovimiento universitario y los militares (bautizados como loscuatro pilares de la revolucin), estableciendo un gobierno militarde izquierda. Durante su breve gobierno nacionaliz las minasMatilde, las Colas y Relaves de Estao, expuls a los Cuerpos de Pazde los Estados Unidos, aument considerablemente el presupuesto delas universidades pblicas, cre la Corporacin de Desarrollo(organismo creador de empresas estatales) y el Banco del Estado(banco de desarrollo); adems otorg una alta reposicin salarial alos mineros. Se estableci la Asamblea Popular, que funcion como unespacio alternativo de deliberacin de los sectores de izquierda queapoyaban su gobierno.Torres fue derrocado por un golpe de Estado de derecha, el 21 deagosto de 1971, dirigido por Hugo Banzer con el apoyo de sectoresconservadores brasileos y parte de la colonia alemana en Bolivia.Parti al exilio, primero a Per, despus a Chile y finalmente a laArgentina. Fue secuestrado y asesinado en Buenos Aires el 2 dejunio de 1976, en el marco del Plan Cndor, que implicaba lacolaboracin de las dictaduras de Hugo Banzer y Jorge RafaelVidela22.20 Su padre muri en la Guerra del Chaco siendo l un nio y tuvoque hacerse cargo de la familia compuesta por seis hermanos. Estudien el Colegio Militar Gualberto Villarroel, del que egres en 1941con el grado de subteniente de artillera.21 Fue presidente a la muerte de Ren Barrientos, ocurrida abrilde 1969, por un accidente areo y mediante el derrocamiento delsucesor Adolfo Siles Salinas. Ovando era copresidente de Barrientosdesde 1966, y colabor con l en el golpe militar que derroc a VctorPaz Estenssoro en 1964, de quien era vicepresidente. El gobierno deBarrientos era de derecha y de carcter contrainsurgente.22 El gobierno de Banzer, por temor a un levantamiento popularcontra su gobierno, se opuso a la repatriacin de los restosmortales de Torres. La familia, con el apoyo del presidente LuisEcheverra, llev sus restos a Mxico para retornar finalmente aBolivia en 1983, con el gobierno democrtico de Hernn SilesSuazo.
  • Fabiola Escrzaga. Fausto Reinaga, el indio y los caudillosmilitares en Bolivia 161El gobierno de Torres coincide con el momento de maduracin delpensamiento indianista de Fausto Reinaga, pues haban salido a laluz, en enero de 1970, La Revolucin india y el Manifiesto delPartido Indio de Bolivia. Ya en pleno gobierno de Torres, y alcalor de los acontecimientos en mayo de 1971, aparece su Tesisindia 23. Esta triloga constituye el ncleo de su formulacinindianista.Tambin coincide con la etapa de intercambio epistolar queReinaga estableci con el indianista peruano Guillermo CarneroHoke24, con quien proyectaba iniciativas para la organizacin indiaa nivel latinoamericano y para que el indio alcanzara el poder enBolivia. Para ambos objetivos el gobierno militar de izquierda deJuan Jos Torres era el vehculo idneo. Solo tena que disputar lavoluntad poltica de Torres a la izquierda marxista boliviana aquien el militar se haba aliado. Carnero, en Per, viva tambin laexperiencia de un gobierno militar de izquierda, el de Juan VelascoAlvarado (1968-1975) que haba realizado una reforma agraria en1969, como base de una alianza antioligrquica que se propona laintegracin de la poblacin india a la nacin. De manera que losescenarios polticos en ambos pases eran semejantes.Veremos cul era el proyecto indio que segn Reinaga se podaaplicar durante el gobierno de Torres, qu tipo de participacin tuvoen l, y qu tanto avanz en la construccin de una alianza entremilitares e indios. En los textos de Reinaga encontramos dosversiones contradictorias de los hechos, que trataremos decontrastar, pues ellas muestran su tendencia a magnificar losalcances de su participacin en el proceso, la percepcin de losobstculos que enfrent para concretar sus aspiraciones, y a quinesatribuye la responsabilidad de ello. El material disponible es ellibro Indianidad (1978), Mi vida, autobiografa escrita en 1972 ypublicada en 2014, y la correspondencia con Carnero durante elgobierno de Torres (Escrzaga, Indianismos). Esta ltima ofrece laversin ms objetiva de los hechos y permite colocarlos en su justadimensin.23 Este libro no aborda la coyuntura del gobierno de Torres. Esun documento elaborado a solicitud de la CNTCB para presentar comotesis poltica en su prximo congreso que se celebrara en febrero omarzo de 1971 y que finalmente se realiz el 2 de agosto.24 Iniciado en octubre de 1969 y que se prolongara hasta 1979,con algunas interrupciones (ver Escrzaga, Indianismos 144-189).
  • 162 MERIDIONAL Revista Chilena de Estudios Latinoamericanos 4,abril 2015Reinaga caracteriza al gobierno de Torres como la alianza de lasfuerzas armadas, la izquierda intelectual y la Central Obrera deBolivia (COB), y cuestiona que Torres haya establecido tal alianza.Afirma que ella despert el miedo al socialismo en la derecha, y questa comenz a conspirar contra su gobierno desde el inicio. Mientrasque las izquierdas, lejos de constituir un apoyo slido para elgobierno, eran un factor de debilidad porque lo presionaban parasatisfacer sus demandas programticas, pero sobre todo parabeneficiarse individualmente del ejercicio del poder, y se dividany confrontaban entre ellas. Cuestiona que Torres no haya recurridoal apoyo de los indios desde un inicio, lo que podra habergarantizado la permanencia de su gobierno (Reinaga, Mi vida295-297).La estrategia poltica que Reinaga formula en esa coyunturaconsiste en reemplazar la alianza de Torres con la clase obrera yla izquierda por la alianza de Torres con los indios, para disputarReinaga a la izquierda la conduccin de los indios y el controlsobre el gobierno de Torres. El medio para ello era acercarse algobierno de Torres para que este asumiera el programa indioelaborado por l, bajo el argumento de que eran los indios de loscuarteles y los indios del campo el soporte posible de su gobiernoen tanto mayora. Una tarea central era para Reinaga recuperar a labase indgena que haba sido cooptada por las izquierdas, hecho quecaracterizaba como la contaminacin de las masas indias por laizquierda marxista que compraba con dinero y poder a los dirigentesindios para hacerlos asumir un programa que no corresponda a susintereses, alejndolos de la revolucin india y llevndolos a unaizquierda que no se encaminaba realmente hacia la revolucinsocialista, sino a la bsqueda del poder personal y que llevaba a ladesindianizacin de los indios.En su autobiografa y en Indianidad, el intelectual indio relataque el general Luis Reque Tern, Comandante del Estado Mayor,adquiri para el ejrcito 200 ejemplares de su libro Tesis India parasu distribucin entre la tropa, lo que para el autor indianistaexpresaba la resolucin de las FF. AA. de sustituir su ideologaeuropea por el indianismo (Reinaga, Indianidad 108). En Tesisindia, Reinaga cuestiona el Pacto Militar-Campesino25 porquerepresentaba la defensa por los pobres de la riqueza y el poder delos ricos. En concordancia con ello, propona nuevos trminos25 Establecido por Barrientos en 1963 para usar la fuerza demasas indias contra las movilizaciones de los obreros.
  • Fabiola Escrzaga. Fausto Reinaga, el indio y los caudillosmilitares en Bolivia 163para un pacto en el que () el ejrcito debe unirse con el indio,pero bajo la ideologa del indio, y (com)partiendo a medias el Podercon el indio; y si no lo hace as, el ejrcito ser destruido por elmarxismo-leninismo (Reinaga, Tesis india 155) .De acuerdo a su relato, el momento crucial de la confrontacinentre el indianismo y la izquierda marxista por la direccin delmovimiento indio fue el 6 Congreso Nacional de la Central Nacionalde Trabajadores Campesinos de Bolivia (CNTCB) de Potos del 2 deagosto de 197126. En dicho congreso, Reinaga a nombre del PartidoIndio de Bolivia (PIB) present un manifiesto, y estuvo presente enel evento el presidente Torres, contraviniendo la exigencia de laCOB de que no participara en lo que cuestionaban como un congresofascista y apcrifo. Seala Reinaga que en el Congreso, Torrespronunci el ms grande discurso de siglos, desde la muerte deAtawallpa hasta nuestros das (Reinaga, Mi vida 301). Citaampliamente el discurso en el que el presidente reconoce queBolivia depende de la fuerza productiva del indio y tiene una deudahistrica con l (Reinaga, Indianidad ).Su posicionamiento sobre Torres era menos entusiasta que el quehaba expresado por Belzu y Villarroel. Sin duda, lo que hizo ladiferencia fue el hecho de que en ese momento el indio ya era unafuerza poltica activa y no un mero receptor de las iniciativas deotros. Esto era posible porque contaban con su propio pensamiento,que era, desde luego, el indianismo elaborado por Reinaga. Era lamaduracin poltica del sujeto indio lo que le permita postular unaalianza con las fuerzas armadas en paridad de condiciones; por ellopropona desde el PIB establecer un nuevo pacto entre las fuerzasarmadas y el indio. Las fuerzas armadas seran el sostn armado delrgimen, el primer Gabinete del Gobierno indio que estara conformadopor cinco ministros militares y cinco ministros indios (Reinaga, Mivida 303).Segn el relato de Reinaga, este acuerdo se suscribi en la reuninrealizada la vspera del 6 Congreso, en la que cuatro personasrubrican el documento titulado Bases: Juan Jos Torres, Presidentede la Republica, y el Gral. Luis Antonio Reque Tern, ComandanteGeneral de las fuerzas armadas, por una parte; Fausto Reinaga yRaymundo Tambo, Jefe y Sub-Jefe del Partido Indio de Bolivia. Elobjetivo de ese acuerdo era concretar26 Da del indio.
  • 164 MERIDIONAL Revista Chilena de Estudios Latinoamericanos 4,abril 2015la alianza fuerzas armadas-indios que le permitiera a Torresreemplazar su alianza con la izquierda y desactivar la amenaza degolpe de la derecha. La manera de concretarlo era la concentracinde un milln de indios en La Paz, el 21 de septiembre, fecha delInti Raymi27. Seran indios reservistas, militarizados y armados defusiles ski, que deban tomar los focos de conspiracin comunista yfascista (de la derecha). El presidente Torres, con su flamantegabinete, luciendo hbito inka jurara el cargo en la Puerta del Solde Tiwanaku. Y ms adelante, en la fecha del Kapaj Raymi (poca de lacosecha), el Gobierno inaugurara en la misma Puerta del Sol elPrimer Congreso Indio de Amrica, al que acudiran los indios de todoel continente americano. Como invitados de honor concurriran los msgrandes espritus del pensamiento, ciencia y arte de todo el mundo,capitalista y socialista (Reinaga, Mi vida 303)28.Pero nada de esto ocurri: el golpe de Estado de Banzer acab conel gobierno de Torres. Reinaga seala los errores cometidos por elPIB y por Torres con cierto sentido autocrtico, pues considera queno debieron esperar al Inti Raymi para iniciar la revolucin, sinocomenzarla el mismo 2 de agosto. Torres debi romper el cercomarxista y confiar en el indio, armar al indio. Pero no lo hizo yla revolucin india no se produjo. La causa fundamental fue paraReinaga el odio racial del blanco al indio que tiene su origen, razy fundamento en Cristo y Marx, que no reconocen la dignidad humanadel indio (Reinaga, Mi vida 314). O en otros trminos, por el miedoal indio por parte de los militares, que temieron que las armas quele entregaran al indio las usara en su contra, por la fuerza de lamemoria de enfrentamientos del pasado.Los acontecimientos relatados en la correspondencia son menosdramticos, y la relacin del intelectual indio con el gobierno deTorres muy distante, como veremos en lo que sigue. En la carta del18 de octubre de 1970, Carnero pide a Reinaga que le explique cules la orientacin del gobierno de Torres, porque la informacin quellega a Lima sobre el nuevo27 Fiesta del sol.28 Podemos comentar muy al margen que laescenografa y vestuario imaginadospor Reinaga, y probablemente imaginados antes por otrosintelectuales indianistas, son de uso frecuente en el gobierno deEvo Morales. Tambin gobernantes anteriores, militares y civiles,han vestido trajes indios, pero no han convertido eso en unaritualidad tan elaborada de recuperacin de la figura mtica delInca.
  • Fabiola Escrzaga. Fausto Reinaga, el indio y los caudillosmilitares en Bolivia 165gobierno es confusa, y le pregunta si el general es su amigo. Enrespuesta a esta solicitud, Reinaga relata las circunstancias de lallegada de Torres al poder, en carta del 24 de octubre. El 18 denoviembre, Reinaga le comenta que fue invitado a participar en laconcentracin de Ayo-Ayo, lugar del nacimiento de Tupak Katari, y enel aniversario del mismo, en que el presidente inaugur una estatuadel caudillo aymara; agrega que el partido (PIB) decidi que no seintegrara a la comitiva presidencial, subrayando que en losdiscursos se expresaron sus ideas: que la revolucin india era lasalvacin de Bolivia; que haba dos Bolivias, la india y la europea;y que para liberar al pas haba que volver a la Bolivia autctona(ver Escrzaga, Indianismos 150).Es a partir de la carta del 5 de enero de 1971 que aparece laidea de influir sobre el gobierno de Torres. En ella, Carnero leaconseja a Reinaga tomar contacto con el presidente, pero lapropuesta est planteada nicamente en trminos de la difusin de lasideas:() [P]ues si hubiese la ocasin de aprovecharse de la acsticagubernamental para difundir tesis y postulados, hay que hacerlo; esms, es una obligacin aprovecharse de todas las tribunas. Si elenemigo te da la mano, cmesela; avanza; cmele todo (en Escrzaga,Indianismos 156).Reinaga le dar otro sentido al consejo de su amigo. En carta del27 de enero le cuenta que ha ganado peldaos para aproximarse aTorres y le pide ayuda para elaborar el programa poltico que habrde presentarle, la Plataforma de Poder Indio, una vez ocurrida laRevolucin india. Cules han de ser las medidas inmediatas y mediatasque debe tomar el gobierno indio? En otras palabras, qu vamos ahacer con el Poder? Objetiva y tangiblemente en qu consistir elsocialismo csmico? (en Escrzaga, Indianismos 158-159).El 13 de julio, Reinaga le comenta a Carnero que ha sidoinvitado por el Ministro de Asuntos Campesinos para asesorar laComisin Poltica de la Confederacin Campesina de Bolivia que deberealizar su Congreso en Potos del 2 al 4 de agosto prximos y que asolicitud suya tambin ser invitado Carnero, a quien pide que vengapara hablar con el general Torres.() Debemos apoderarnos del Gral. Torres. Contigo es posible.Pero yo solo no puedo. Se me odia mucho. Hay prevencin contra
  • 166 MERIDIONAL Revista Chilena de Estudios Latinoamericanos 4,abril 2015m. Contigo cambia la cosa. Ven, ven Guillermo; aunque no tellegara la invitacin, pero ven el momento es nico en este pas paranuestra Revolucin (en Escrzaga, Indianismos 172).En carta del 12 de agosto, Reinaga resea su triunfalparticipacin en el 6 Congreso Nacional Campesino de Potos, leadjunta el Manifiesto y le dice que el Congreso tom la tesispresentada por el PIB como su tesis poltica; ech casi a patadas alsector comunista y entre aplausos oy su palabra, ley el Manifiestoy recibi su ejemplar de Tesis India y del Manifiesto del PIB (enEscrzaga, Indianismos 175).Sorprende sin duda el que Reinaga esperara que Carnero le dijeradesde Per qu hacer, pero an ms que apostara a que la gestin delperuano ante el presidente Torres fuera la va para concretar laalianza del gobierno militar con los indios. Carnero nunca pudoviajar a La Paz; la falta de dinero y la afeccin que sufra alcorazn se lo impidieron29. El 30 de noviembre ya se ha producido elgolpe contra Torres y ste se encuentra exiliado en Per. En esemomento, Reinaga consulta a Carnero: Qu dijo el General Juan JosTorres sobre la Revolucin india? Por qu no la haba hecho, siendo asque las FF.AA. estaban de acuerdo con dicha Revolucin? Por miedo alimperialismo yanqui o por miedo a Lechn?! (Escrzaga, Indianismos179). Reinaga espera incluir esa informacin en el libro que escribeen ese momento y que se llama provisionalmente El marxismoindio-guerrilla india y guerrilla blanca. En l, anuncia que har alanlisis de la nueva situacin, a la que caracteriza como revolucinfascista, y considera que frente a ella lo que corresponde esque() [l]as legiones del Che deben darse la mano con la Guerrillaindia, que debe estallar, que ha de estallar. Empero en este casolos blancos debern ponerse a las rdenes del indio guerrillero. Laideologa? Ser el indianismo, el marxismo indio; porque slo alinflujo y la magia de esta ideologa, aqu habr Revolucin (enEscrzaga, Indianismos 179).Es sorprendente el planteamiento de una reconciliacin entreelementos que l haba descrito como confrontados (indianismo ymarxismo): una alianza entre indios y guerrilleros contra alejrcito que gobierna con un29 Tuvo un infarto en la temporada que gobern Torres, segnrelata en una carta.
  • Fabiola Escrzaga. Fausto Reinaga, el indio y los caudillosmilitares en Bolivia 167programa fascista. De manera que en las nuevas circunstanciareemplaza la alianza propuesta con las fuerzas armadas de Torrespor una alianza con la guerrilla.El 28 de enero de 1972, Reinaga escribe a Carnero reprochndolehaber perdido la oportunidad de hacer la Revolucin india, con lacada de el indio Torres, como lo bautiz Carnero por el color de supiel, por no haber ido a Bolivia a presentar el programa de larevolucin india a Torres (ver Escrzaga, Indianismos 181)30.gaRca meza y la Revolucin de las FueRzas aRmadasEn el libro Bolivia y la Revolucin de las Fuerzas Armadas,Reinaga no hace ningn panegrico de Garca Meza ni de las fuerzasarmadas, como los que haba hecho de los caudillos progresistasBelzu y Villarroel; solo plantea lo que las fuerzas armadas deberanhacer con el poder que tienen en contra del enemigo comn que era laizquierda. Sin duda fue un gran error poltico identificarse con ungobierno golpista de derecha en torno a ese enemigo comn,sostenerse en esa idea y argumentar sobre la base de ella en lossubsiguientes textos, probablemente bajo un razonamiento del tipo:el enemigo de mi enemigo es mi amigo. Fue una prdida de norte, peroel contexto en que ello ocurre atena la magnitud del error.Un tema que abarca una parte considerable del libro es su crticaal marxismo y a la Iglesia progresista que se han apoderado de lasorganizaciones indias. El distanciamiento de la izquierda, iniciadoen su etapa nacionalista revolucionaria, se vuelve confrontacintotal y anticomunismo en la etapa amatica. La razn de ello es ladisputa de las bases indias por parte de las izquierdas y lacapacidad creciente de stas para cooptarlas y desplazar al discursoindianista de Reinaga. Hecho que hace crisis para el intelectualindio en el ao 1980, en que el enemigo se apropi de la organizacindel Congreso Indio de Ollantaytambo, Per, en el cual se constituyel Consejo Indio Sudamericano (CISA). Ambas iniciativas30 Despus de esta carta, la comunicacin se interrumpe hasta mayode ese ao, en que Carnero le comenta haber escrito varias cartasque por lo visto no llegaron a su destino.
  • 168 MERIDIONAL Revista Chilena de Estudios Latinoamericanos 4,abril 2015fueron proyectadas junto con Carnero a lo largo de sucorrespondencia de diez aos, y finalmente se concretaron sin laparticipacin de Reinaga31, pero con la participacin protagnica desu hijo Ramiro Reynaga y de su amigo Guillermo Carnero. Eldesencanto es maysculo porque los pierde como aliados polticos y sevuelven instrumentos de su enemigo. A los indios tambin los pierdeporque se convirtieron en la base social de sus adversarios.El desarrollo y resultados del encuentro mostraron las grandeslimitaciones polticas de los dirigentes indgenas de los distintospases, su inters se redujo al dinero del financiamiento que despertla codicia y la divisin entre ellos. Reinaga denuncia en el libroque sus antiguos aliados hayan sido comprados con los recursos delas iglesias que financiaron el evento y los nombra puntualmente.Hay una lectura distorsionada de varios temas, como es el caso deCISA, que ve como la apropiacin de los indios por el comunismo paratomar el poder en Bolivia, cuando ms bien las institucionesinternacionales buscaban mediatizar desde los proyectos radicalesde los indios, es decir, quitar a los partidos de izquierda queproponan la lucha armada su influencia sobre sectores indios endistintos pases.Un hecho que probablemente lo llev a congraciarse con elgobierno de Garca Meza fue la indemnizacin parcial que recibi porel decomiso de su biblioteca, hecho en el ao 1972 por el gobiernode Banzer, y que Reinaga haba denunciado judicialmente en su pas yante la opinin pblica internacional (Reinaga, Bolivia).Despus de la experiencia con Torres y de la marginacin por lasorganizaciones indias, la posibilidad de influir en un gobiernomilitar para que implementara su programa de la revolucin india sevolvi la nica posibilidad de concretar su proyecto poltico, puesaun en los procesos de organizacin de partidos indios elclientelismo se convertir en una pauta poltica fundamental. Losmilitares efectivamente lean sus textos porque en ellos planteabauna forma de nacionalismo aymara que tena semejanzas con elnacionalismo de las fuerzas armadas.31 Reinaga elabor un texto para su lectura en el encuentro, queno se consider.
  • Fabiola Escrzaga. Fausto Reinaga, el indio y los caudillosmilitares en Bolivia 169consideRaciones FinalesTrat de mostrar que el posicionamiento anticomunista yantimarxista de Reinaga, que fue llevado al extremo en su dilogocon la dictadura de Garca Meza en 1986, puede resultar comprensiblesi se hace una lectura distinta de la que hizo la izquierda que fuevctima de la dictadura. Desde esta otra perspectiva, en su etapaamatica, Reinaga se propona liberar al indio de la visin del mundooccidental que le impona la izquierda, porque en ella el indio eraotro ajeno, un obstculo, y solo convirtindose o acercndose a lacondicin de campesino o de obrero tena cabida en el proyectosocialista. La autoafirmacin de lo indio en Bolivia, la elaboracinde una visin del mundo propia o la recuperacin de la cosmovisinancestral pasaban para Reinaga por la negacin y confrontacin de esaizquierda.En lo abordado podemos ver cmo Reinaga elabora una lecturaextrema de una realidad polarizada. No inventa la polaridad ni lainocula en la realidad, solo la expresa; interpreta a los sujetoscolectivos producidos por esa polaridad y que la reproducen; lapolaridad la impuso la forma de dominacin establecida sobre losindios desde la conquista y sus consecuencias. Reinaga no buscanegar o cambiar esa polaridad sino asumirla y construir a partir deella una fuerza poltica propia para el indio y una nueva realidad.La izquierda boliviana, formada como izquierda occidental, eraportadora de una lectura de la realidad que negaba o buscaba anularcon la sntesis dialctica esa polaridad, pero una cosa erapretenderlo y otra lograrlo, entonces quedaba en la irrealidadporque no se atreva a ver lo que s haba.Es claro que los proyectos de alianza de los indios con loscaudillos militares formulados por Reinaga minimizan el papel delindio organizado y su capacidad de lucha. Son, como vimos, unamanera de remediar la disparidad de fuerzas, de armamento, derecursos materiales, de preparacin militar, que no se poda resolvera la manera que lo hicieron, por ejemplo, las organizacionespolticas o armadas de izquierda, quienes podan recurrir alfinanciamiento externo. La alianza con las fuerzas armadas era unamanera propia de resolver las limitaciones de ese actor. El otropunto era el problema de la formulacin del proyecto detransformacin que no haba resuelto, como se puede ver en susesfuerzos desesperados durante el gobierno de Torres. La dificultado incapacidad para elaborar el programa revolucionario el qu hacer?es un problema vivido no solo por Reinaga, sino por cualquier grupode izquierda en cualquier pas.
  • 170 MERIDIONAL Revista Chilena de Estudios Latinoamericanos 4,abril 2015Por ello, imitar los proyectos de los grupos triunfantes deotros pases o las pautas impuestas por otros era la solucin msfcil. Reinaga se debate entre la imitacin de las frmulasoccidentales que cuestiona y la bsqueda de formulaciones propiasque no encuentra.La reconstruccin de los episodios de revolucin dirigidos por loscaudillos militares hechos por Reinaga no tienen la intencin delhistoriador sino la del idelogo y tal vez la del estratega poltico.Tales experiencias ofrecen en sus actos de gobierno en beneficio delas masas indias un programa de transformacin social llevado a laprctica. Reinaga busca en su reconstruccin de la gesta de Belzu yen las experiencias de Villarroel y Torres el programa de lucha delos indios bolivianos, porque no era suficiente lo propuesto en losprogramas de las revoluciones europeas que los partidos deizquierda imitaban. Era necesario buscar en las experienciashistricas propias, porque adverta en ellas mayor legitimidad yviabilidad y la identificacin de las particularidades de larealidad boliviana y sus actores.BiBliogRaFaBaRRios moRn, J. Ral. El nacionalismo militar boliviano.Elementos para la reformulacin estratgica. Nueva Sociedad 81(1986): 36-45. Impreso.cHoque canqui, RoBeRTo. El indigenismo y los movimientosindgenas en Bolivia. La Paz: Convenio Andrs Bello, 2014.Impreso.escRzaga, FaBiola. Comunidad indgena y revolucin en Bolivia: elpensamiento indianista-katarista de Fausto Reinaga y Felipe Quispe.Poltica y Cultura 37 (2012): 187-212. Impreso.________ La huella de Maritegui en Fausto Reinaga. Amrica Latina13/14 (2012): 237-286. Impreso.________ Indianismos. La correspondencia de Fausto Reinaga conGuillermo Carnero Hoke y Guillermo Bonfil Batalla. Coordinacin eintroduccin de Fabiola Escrzaga. La Paz, CEAM y Fundacin AmuticaFausto Reinaga, 2014. Impreso.maRx, kaRl. El 18 Brumario de Luis Bonaparte. Obras escogidas en3 tomos, Tomo I, Mosc: Editorial Progreso, 1978. Impreso.
  • Fabiola Escrzaga. Fausto Reinaga, el indio y los caudillosmilitares en Bolivia 171mndez g., cecilia. Las paradojas del autoritarismo: ejrcito,campesinado y etnicidad en el Per, siglos XIX al XX. Iconos 26(2006): 17-34. Impreso.oRTiz, cecilia. Indios, militares e imaginarios de nacin en elEcuador del siglo XX. Quito: FLACSO/Abya-Yala, 2006. Impreso.plaTT, TRisTn. Entre chaxwa y muxsa. Para una historia delpensamiento poltico aymara. Tres reflexiones sobre el pensamientoandino. Trse Bouysse-Cassagne et al. La Paz: HISBOL, 1987.Impreso.Reinaga, FausTo. Vctor Paz Estenssoro. La Paz: CEC, 1949.Impreso.________ Belzu. Precursor de la Revolucin Nacional, La Paz:EdicionesRumbo Sindical, 1953. Impreso. ________ Tierra y libertad. Larevolucin nacional y el indio. La Paz: EdicionesRumbo Sindical, 1953. Impreso.________ Indianidad. La Paz: S/e,1978. Impreso.________ Bolivia y la revolucin de las FuerzasArmadas. La Paz: s/e, 1981.Impreso.________ La revolucin india. La Paz: Ediciones FundacinAmaticaFausto Reinaga, 2001. Impreso.________ Tesis india. La Paz, s/e,2003. Impreso.________ Mi vida. La Paz: Fundacin Amutica FaustoReinaga, 2014.Impreso.sanJins, alFRedo. El Quijote mestizo. Historia noveladade Balzu y Melgarejo,con el proceso de la demagogia y de la dictadura en Bolivia. LaPaz: Editorial Centenario, 1951. Impreso.zavaleTa meRcado, Ren. El poder dual. Problemas de la teora delEstado en Amrica Latina. La Paz: Los amigos del libro, 1987.Impreso.________ Consideraciones Generales sobre la historia de Bolivia(1932-1971). Amrica Latina: Historia de medio siglo. 1.- Amrica delSur. Pablo Gonzlez Casanova, coord. Mxico: Siglo XXI, 1988. 74-128.Impreso.Recepcin: 14.10.2014 Aceptacin: 16.12.2014
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